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- Secadoras
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Tiempo de secadoras. ¿Cuál elijo?
Después de meses de intenso calor, por fin, llega el otoño y la bajada de temperaturas. Aunque este año proveen una estación cálida y seca es verdad que empezamos a tener más problemas a la hora de secar nuestras prendas al hacer la colada. Es en esta época cuando la gente se anima a adquirir una secadora para facilitar el secado de su ropa, agilizar el proceso, evitar olores desagradables a humedad y facilitar el día a día.
Para despejar las dudas que puedan surgir al comprar un electrodoméstico para el secado, hoy queremos enseñarte las diferencias entre las secadoras de bomba de calor y condensación.
SECADORAS DE CONDENSACIÓN: Cogen el aire del exterior y lo calientan con una resistencia eléctrica. Cada vez que toman el aire tienen que calentarlo. Ese es el motivo por el que son menos eficientes que las de bomba de calor. El aire ya calentado es el que se encarga de secar todas las prendas puestas en el tambor.
Al mismo tiempo, el aire frío y seco del exterior entra en la secadora a través de un conducto colocado en la parte delantera. Al cruzarse con el aire caliente y húmedo del tambor, el aire caliente se enfría y la humedad que transporta se condensa y se convierte en agua. Al final del proceso, el agua se elimina a través de un desagüe.
Las secadoras de condensación de NEW POL ofrecen dos tipos de desagüe: El convencional que el agua va a parar a un cajón situado en el frontal de la máquina, y que este debe vaciarse cuando esté lleno. Y además del cajón incluimos un tubo de desagüe (esto la mayoría de los productos del mercado no lo incluyen) que puede ser conectado a una toma de agua y no tendremos la necesidad de evacuar el agua condensada cada cierto tiempo.
SECADORAS DE BOMBA DE CALOR: Son las más innovadoras y eficientes a día de hoy en el mercado. Convierten la humedad en calor y la reutilizan de forma que consiguen optimizar la energía. El aire que circula por el electrodoméstico lo hace a través de un calentador donde se vuelve a calentar y el proceso se reanuda.
Luego, el aire frío que ha absorbido la humedad de la ropa es transportado hasta el condensador, donde traspasa su calor al líquido refrigerante. De este proceso se consigue un aire frío que vuelve al calentador, donde se vuelve a calentar y el proceso se reanuda.
DIFERENCIAS ENTRE CONDENSACIÓN Y BOMBA DE CALOR: En primer lugar, en las secadoras de bomba de calor las prendas se secan a una temperatura inferior. Por ese motivo te va a dar la sensación de que las prendas están húmedas al recogerlas. No es así; simplemente es que no están tan calientes como cuando se secan en una secadora de condensación. Que seque con una temperatura inferior es beneficioso por varios motivos. El primero, garantizan una mayor eficiencia energética y segundo mayor cuidado de las prendas. Puedes secar cualquier tejido al tratarse de una temperatura que cuida la ropa con delicadeza.
En segundo lugar, en las secadoras de condensación tienes que hacerte cargo tú de mantener el aparato en buenas condiciones. Sin embargo, algunos modelos de secadoras de bomba de calor incorporan un condensador autolimpiante que te ayuda a ahorrar tiempo y esfuerzo.
Por último, las secadoras de condensación son más económicas que las de bomba de calor. Se debe a que las segundas son más eficientes energéticamente. Por tanto, aunque la inversión inicial sea más elevada, a la larga compensa.
La gama de secadoras New Pol cuenta con modelos de 7 y 8 kgs de capacidad y tecnologías avanzadas en condensación y bomba de calor. Entre sus características podemos encontrar programas rápidos (12’ y 29’), Sensor Drying Technology que favorece el ahorro energético en secado, la duración óptima de los programas y un secado uniforme en 3 niveles. Además, el tambor incluye luz interior que facilita la carga y descarga de la colada.
Y ahora que ya sabes mucho más…¿por cuál te decides?.
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