Todas las pequeñas divisiones de la tercera bandeja te facilitan el colocado de los cubiertos. Quizá inviertas un par de segundos más que al dejarlos sin prestar atención en el cesto convencional, pero de esta manera aseguras un lavado mucho más eficiente. Además, ahorras tiempo a la hora de colocarlos de nuevo en su sitio de la cocina. También ganas más sitio en la cesta inferior. Podrás colocar ollas de mayor tamaño o más cantidad de platos. Habrá más sitios entre tus útiles y el agua y jabón de lavado llegará hasta el último gramo de grasa.
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